Continúo rodando,
al compás,
de mi propia noria;
haciendo mi papel
secundario,
hasta que enmudezco,
cuando tu presencia es
notoria.
Entonces,
siento que mis palabras,
se quedan en el aire;
como una solitaria
cometa,
a la que manejan
incontrolable.
Nos miramos,
pero en eso queda;
otra vez,
la inseguridad se me
apodera.
¿Porqué será?,
que me hago tan
pequeñita;
cuando lo que quiero,
es susurrarte al oído,
que pienso en ti cada
día;
que cuando nadie me ve,
dibujo corazones,
rodeando tu fotografía;
esa que te hice en
secreto,
y que me mantiene viva.
En mi escondite,
te escribo cartas,
que evito enseñar a
nadie;
me imagino frente a ti,
desenmascarando este
sentimiento,
que huye y es cobarde;
diciéndote esas
palabras,
que mi corazón,
guarda con sus propias
llaves;
incluso me hundo,
por esta impotencia
irrazonable.
Soy,
y dejo de ser,
ese duende en tu mirada;
al que ruegas con un
suspiro,
que deje de estar
callada;
porque sabes,
que en cada uno de
nuestros sueños,
me entrego a ti en
cuerpo y alma;
algunas veces
desaparezco,
para que me encuentres
en la aurora.
Disculpame,
si la timidez es mi
única arma;
no he tenido la ocasión,
de robarte ese beso,
que te despertara;
sé que cuando lo haga,
te demostraré todo
aquello,
difícil de explicarte
con palabras.
Mientras seguiré
siendo,
esa ave emigrante,
que en libertad se
traslada a otros lugares;
una huella en tu
corazón,
totalmente imborrable;
seremos dos
desconocidos,
que esperan
reencontrarse;
dos imanes que se
atraen,
y se empeñan en
separarse.
Lateras en mi corazón,
y respirare,
con el aire que te
sobre;
hasta que me quede sin
aliento,
cada vez que por ti
llore;
me consumiré si no te
veo,
me moriré,
si te viera junto a
alguien;
pero no podré
reprocharte,
lo que ya me reprocho
yo,
cada instante.
Sé que hasta que no
saltes,
no saltaré yo;
sé que si amanece,
saldrá nuestro sol;
rompamos pronto este
hielo,
antes de que se congele
el amor.
(Pincha aquí para ver más)_ Estados de Animo: En mi escondite
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