Ella,
ya
no dibuja,
entre
sus cuadernos princesas;
no
cree en los príncipes,
ni
cree en la primavera.
Desde
aquel día,
siente
congelada sus venas;
una
mezcla,
entre
rabia,
y
profunda tristeza.
Ella,
componía
sus propias canciones;
era
amante de la música,
una
musa que alimentaba pasiones;
era
dulce e inocente,
era
joven y prudente,
era
esa chica que vivía entre sus ilusiones.
Un
día,
se
puso su vestido rojo;
con
la ilusión,
iluminada
entre sus ojos;
iba
a mostrar,
su
talento ante el piano;
pero
aquel hombre,
buscó
algo más a cambio.
Entonces,
fue
atrapada entre sus redes;
dejándose
llevar,
aunque
ella no quiere;
en
sus ojos caían lagrimas,
como
si fueran color sangre;
no
encontraba salida,
no
la escuchaba nadie.
Cuando
él la tocaba,
sentía
cuchillos afilados,
que
la arañaban;
los
besos que él le daba,
le
hacía sentirse más manchada;
sentía
repulsión por su piel,
se
sintió utilizada;
no
volvió a sonreír,
se
le borró el amor,
que
antes la llenaba.
Ella,
no
puede olvidar,
ese
amargo recuerdo;
no
ha vuelto a componer,
no
desea ya su sueño;
se
quedó reclutada entre las telarañas,
que
la atraparon en ese juego;
se
hizo una mujer,
con
alma de hielo;
y
ahora camina sola,
deseando
convertirse en viento.
(Pincha aquí para ver más)_ Estados de Ánimo: Color Sangre
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