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lunes, 26 de enero de 2015

Madre

Cuando estaba en tu vientre,
esperabas a ver como era;
me notabas dentro de ti,
y me susurrabas “mi princesa”.

Cada mes,
veías crecer tu barriga;
y al llegar a los 9 meses,
luchaste para que encontrara la salida.

Con todo tu valor,
siempre me cuidaste;
te hiciste la promesa,
de ser siempre mi madre.

Soportaste,
todos mis llantos,
y cada una de mis enfermedades;
me defendías,
aunque no me creyera nadie;
supiste levantarme,
aunque me cayera en un gran bache;
me curabas las heridas,
y prevenías que nada me pasase.

Por eso madre,
no mereces un día,
para valorar lo que me has dado;
a pesar de tus gritos,
y de tus castigos,
todo me has entregado;
me diste la vida,
por mí has luchado;
he aprendido de tus palabras,
he crecido a tu lado.

Sé que nadie más,
me hará reír y llorar,
como lo haces tú;
sé que nadie me podrá entender,
como lo has hecho tú;
sé que siempre me esperaras,
y jamas me darás de lado;
sé que sufrirás mis tristezas,
aunque a ti no te hayan dañado.

Ojala,
sea igual de madre,
como lo has sido y eres tú;
dar cada una de tus lecciones,
aportar tu misma luz;
entender cada una de tus lágrimas,
y cada uno de tus actos;
proteger a mi hijo,
como me protegiste,
entre tus brazos.

Madre,
nadie más,
reemplazará tu lugar;
formas parte de mí,
nunca te voy a olvidar,
te quiero con toda mi alma,
valoro todo lo que me diste,
y todo lo que me das;
sé que nadie como tú,
me va a querer igual,
con tanta verdad.

(Para ver más pincha aquí) _ Estados de Animo: Madre

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